Uno de los principales problemas en el suministro de agua en Costa de Marfil, como sucede en otros países de África, es la falta de infraestructuras suficientes para el tratamiento y potabilización del agua para consumo humano y para la industria y la agricultura.
Además, hay que tener en cuenta que, si bien el agua potable es imprescindible para muchas actividades de la vida cotidiana, en Costa de Marfil la escasez de agua tiene un especial impacto en la agricultura.
El impacto del agua en la economía y el sector agrícola de Costa de Marfil
Desde el 2012, y hasta el shock global que supuso la pandemia en el 2020, el país se ha posicionado como una de las economías más sólidas de África, con una tasa media de crecimiento del 8% anual, gracias a los sectores de construcción e inversiones públicas. El sector manufacturero, las exportaciones y los servicios también se están consolidando lo suficiente para contribuir a reactivar este crecimiento. Sin embargo, hay una asignatura pendiente: la mejora de las capacidades del sector agrícola, que hasta el 2012 había sido el principal motor para el crecimiento económico y la reducción de la pobreza.
En realidad, Costa de Marfil cuenta con un gran potencial agrícola si hablamos de tierras cultivables, pero la productividad de este se ve afectada, entre otros factores, por la falta de control del agua. Esto se está resolviendo gradualmente gracias a la implementación de nuevas técnicas de irrigación, como el equipamiento de fondos de valles interiores y el riego por goteo para la producción de hortalizas. De hecho, el Gobierno del país considera la irrigación como una de las prioridades del sector agrícola, ya que los cultivos como el café y el cacao siguen siendo claves para la economía.
Proyectos en curso para el acceso y el tratamiento del agua potable
Además del impacto del agua en la agricultura y la economía, y por lo tanto en la erradicación de la pobreza, hay otro frente que atacar: la mejora del agua —tanto a nivel de acceso como de potabilización— y de las infraestructuras de saneamiento e higiene.
Desde hace ya años, la asociación público-privada para el servicio público del agua de Costa de Marfil es una de las más antiguas del mundo, en activo desde 1960. Desde los 90 ha realizado grandes progresos en la ampliación del acceso al agua potable tanto en regiones rurales como en zonas urbanas, cada vez más pobladas.
En 2019, el país recibió 150 millones de dólares para mejorar los servicios de abastecimiento de agua y saneamiento en 12 ciudades secundarias, lo que, según Pierre Laporte, Director del Banco Mundial para Costa de Marfil, está ayudando al país no solo a mejorar sus servicios de abastecimiento de agua y saneamiento para la población más empobrecida, sino a crear un entorno propicio para la financiación privada, gracias al fortalecimiento del rendimiento de los servicios de agua en zonas urbanas.
Así, todavía queda un amplio margen de mejora, con parte de la población todavía sin acceso o con acceso insuficiente a agua potable para consumo o higiene. ¿Son las plantas de electrólisis y la financiación privada el próximo paso del sector del tratamiento del agua en Costa de Marfil?