Los debates sobre la Inteligencia Artificial están a la orden del día, debido a su rápido avance y a sus implicaciones en la tecnología, la ética y la economía. Sin embargo, hay muchas áreas por explorar, y lo que es innegable es que la IA puede contribuir a grandes avances si se utiliza adecuadamente.
Este es precisamente el caso que plantea Advait Kumar: Cómo utilizar la inteligencia artificial para optimizar la distribución del agua. Kumar considera que la IA, gracias a sus capacidades de análisis de datos en tiempo real y modelado predictivo, permitirá a las empresas de suministro de agua tomar decisiones basadas en datos, lo que se traducirá en una mayor eficiencia, sostenibilidad, resiliencia y fiabilidad en la distribución del agua.
En la India, un 70% de las fuentes de agua dulce del país están contaminadas, y aproximadamente el 70% de las aguas residuales no se tratan. La creciente urbanización del país y el cambio en los patrones climáticos sólo contribuyen a agravar el problema. Ante este preocupante escenario, la IA se posiciona como una de las mejores soluciones a gran escala, con el potencial de revitalizar los sistemas hídricos urbanos, mejorando su resistencia, sostenibilidad y fiabilidad.
Según Kumar, en medio de los complejos retos que plantean la alta densidad de población, los cambios medioambientales, el envejecimiento de las infraestructuras y la persistente contaminación del agua, existe una clara necesidad de transformar la gestión de los recursos hídricos.
Pero lo que hemos descrito hasta ahora se podría aplicar a muchos otros países, especialmente en África: La deficiencia en las infraestructuras y en la gestión de los recursos hídricos, y la falta de acceso a fuentes de agua potable en zonas rurales y urbanas son problemáticas en países como Kenia, Senegal, Camerún, Ghana o Costa de Marfil.
¿Cómo puede la Inteligencia Artificial mejorar la gestión y distribución de los recursos hídricos en África?
En África, la escasez de agua y los problemas relacionados con su suministro son todavía retos pendientes, pero cada zona tiene sus particularidades, en función de los recursos hídricos de los que dispone, de la climatología y de las infraestructuras y políticas públicas existentes, entre otros factores. ¿Cómo puede la IA contribuir a abordar las diferentes problemáticas de cada país y región?
- Predicción y monitoreo de la disponibilidad de agua: La IA permite analizar datos históricos y en tiempo real, como la precipitación, el nivel de agua en ríos y embalses, y las condiciones climáticas para predecir la disponibilidad de agua en diferentes regiones. Esto puede ayudar a las empresas o entidades encargadas de la gestión a tomar decisiones informadas sobre la gestión de recursos hídricos.
- Gestión de la demanda: Los sistemas de IA pueden optimizar el uso de agua en agricultura, industria y hogares al predecir patrones de demanda y ajustar la distribución en consecuencia.
- Detección de fugas y mantenimiento de infraestructuras: La IA puede utilizarse para monitorear y detectar fugas en sistemas de abastecimiento de agua, lo que ayuda a reducir las pérdidas y a mantener la infraestructura de manera eficiente. Esto tiene un especial impacto en lugares donde las infraestructuras son deficientes u obsoletas, por lo que hay fallos frecuentes que afectan a la distribución del agua.
- Modelado de cuencas hidrográficas: Los modelos de IA pueden simular el comportamiento de las cuencas hidrográficas, lo que permite a los gestores de recursos hídricos planificar y tomar decisiones informadas sobre la gestión de ríos y embalses.
- Sistemas de alerta temprana para inundaciones y sequías: Puede ser utilizada para desarrollar sistemas de alerta temprana que adviertan sobre eventos climáticos extremos, como inundaciones y sequías, permitiendo una respuesta rápida y la gestión adecuada de recursos hídricos en situaciones de emergencia. Debido al impacto que está teniendo el cambio climático en el acceso al agua potable, este será un punto clave en la gestión de agua del futuro.
- Acceso a datos en áreas remotas: La IA puede ser utilizada para analizar imágenes satelitales y datos recopilados por sensores remotos para evaluar la calidad del agua y la disponibilidad de agua en áreas remotas o de difícil acceso.
- Gestión de aguas subterráneas: También puede ayudar en la gestión sostenible de aguas subterráneas al predecir el comportamiento de los acuíferos y optimizar la extracción de agua subterránea.
Hay que tener en cuenta que, para que la aplicación de la inteligencia artificial a la gestión de recursos hídricos dé los resultados esperados, requiere una colaboración efectiva entre gobiernos, organizaciones internacionales, instituciones académicas y la industria, así como abordar cuestiones relacionadas con la infraestructura y la capacitación de personal para garantizar que la tecnología sea accesible y beneficiosa para las comunidades locales. Sin embargo, es una herramienta que creemos que facilitará y mejorará enormemente la gestión del agua a nivel global.
